El Puente-Hispanic Ministry expande su presencia, abre una nueva oficina en la antigua rectoría de California

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El Padre Antonio Viviano impartió una bendición y roció agua bendita en todos los salones.

Luego llegó el momento de cortar la cinta, agradecimientos, de la hospitalidad y un recorrido por el nuevo lugar.

Con eso, la nueva oficina de El Puente en la antigua rectoría de la Anunciación en California se abrió al público.

Patrocinado por las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, la Diócesis de Jefferson City y las parroquias locales, El Puente es una agencia separada sin fines de lucro que ofrece una variedad de servicios a la comunidad hispana en y a los alrededores de Jefferson City y California.

“Todo lo que hacemos es gracias a todos ustedes”, dijo Cristhia Castro, directora ejecutiva de El Puente, a los miembros de la junta directiva, feligreses y voluntarios en la gran inauguración el 22 de octubre. “No podemos hacer nada de esto sin su apoyo y el amor que tienen por nuestra comunidad”.

La Parroquia de la Anunciación contribuyó con alrededor de $25,000 al costo de la renovación completa de la rectoría, junto con un contrato de arrendamiento de cinco años con El Puente.

El Puente respondió a esa inversión con otros $40,000.

Voluntarios ayudaron con el trabajo, el cual incluyó nuevas ventanas, plomería, aire acondicionado, piso, pintura, y una bomba de sumidero en el sótano.

“El Puente realmente dio un paso adelante con las finanzas, la mano de obra y el compromiso”, dijo el P. Viviano, párroco de la Parroquia de la Anunciación y de la Parroquia de San Andrés en Tipton. “Va a servir a mucha gente”.

“Tomando la iniciativa”

Después de cortar la cinta, la Sra. Castro colocó la mitad de la cinta de tonos otoñales sobre los hombros de Nena Neal, quien se ha desempeñado como proveedora de servicios sociales bilingües para El Puente desde 2004.

La Asociada de Programas, Aurora Guillén, habló directamente a la Hermana Peggy Bonnot y la Hermana Margaret Snyder de las Hermanas de la Caridad del Verbo Encarnado, quienes sintonizaron la ceremonia en la transmisión en vivo.

Ellas, junto con la Hermana del Verbo Encarnado, Marianne Kramer, ya fallecida, fundaron El Puente en 1999 para “hacer presente el amor sanador de Jesús el Verbo Encarnado, promoviendo la dignidad humana a través de un ministerio de presencia y alcance a la comunidad Hispana”.

“Hna. Peggy, Hna. Margaret, gracias por tomar la iniciativa”, dijo la Sra. Guillén. “Para nosotros, como miembros de la comunidad hispana, significa mucho que alguien haya visto la necesidad y haya dado un paso para comenzar algo como esto que ha ayudado a tantas personas y continuará haciéndolo, si Dios lo permite”.

Los retratos de las tres hermanas fundadoras adornan el vestíbulo del edificio renovado.

“Beneficioso para todos”

La Sra. Castro dijo que el proyecto de renovación requirió “muchas horas de trabajo voluntario, mucha pasión de la comunidad”.

Ella elogió a los feligreses de la Anunciación que estaban ansiosos por devolverle la vida a la rectoría y ver que se le diera un buen uso.

El Padre Viviano vive en la rectoría de Tipton.

“Fue una situación beneficiosa tanto para ellos como para nosotros: colaborar, poner nuestros esfuerzos juntos para que esto sucediera”, dijo la Sra. Castro.

Ella comentó que el objetivo es brindar en la oficina de California todos los servicios educativos y sociales que están disponibles en la ubicación de Jefferson City.

Es probable que los programas en California evolucionen con el tiempo, según las necesidades locales y si alguna otra agencia está ayudando a satisfacerlas.

“Siempre tratamos de colaborar con otras organizaciones para no duplicar servicios”, dijo la Sra. Castro.

Mucho que ofrecer

El personal de cuatro personas de El Puente se turnará entre las ubicaciones de Jefferson City y California hasta que se pueda contratar personal adicional.

El Puente actualmente atiende a más de 700 personas en más de 500 hogares.

Con la ayuda de voluntarios y una junta directiva dedicada, el personal trabaja con varias organizaciones comunitarias y de la Iglesia para identificar y satisfacer las necesidades materiales y espirituales de los hispanos.

Además de acompañar a las personas a las citas médicas y brindar servicios de interpretación de idiomas, el personal y los voluntarios brindan información sobre finanzas personales y presión arterial alta junto con clases de nutrición y conectan a las personas con asistencia a corto plazo y recursos a largo plazo.

La ayuda adicional incluye: educación y capacitación, clases de inglés como segundo idioma, programas de apoyo para nuevas madres, tutoría después de la escuela y servicios comunitarios para promover la salud.

Verdaderamente presentes

La Sra. Neal dijo que es importante tener una segunda ubicación en California, donde una planta de procesamiento de alimentos cercana ha atraído a muchos inmigrantes de países de habla hispana en América Central y del Sur.

“Estamos aquí para ayudar a las familias necesitadas”, declaró la Sra. Neal. “Algunas personas necesitan mucha ayuda”.

Notó que el idioma puede ser una barrera grave para recibir una buena atención médica.

La Sra. Neal se desempeñaba como intérprete bilingüe en un hospital en el condado de Orange, California, en 2002 cuando ella y su esposo llegaron a Jefferson City para visitar a su suegra.

Tenían la esperanza de criar a sus hijos más cerca de los abuelos de los niños, que tenían una granja en el condado de Cole.

La Sra. Neal vio un anuncio de búsqueda que la Hna. Peggy había publicado para un intérprete médico para El Puente.

“Envié mi currículum, ella me llamó para una entrevista y así fue como comencé aquí”, recordó la Sra. Neal.

Desde entonces, ha estado presente en casi todos los nacimientos de hijos de padres Hispanos que hablan español en Jefferson City.

Eso, señaló la Sra. Guillén, ha implicado “permanecer despierta toda la noche en el hospital innumerables veces, preocupándose y orando con todo su corazón cuando es un parto difícil y enviando mensajes de texto a sus amigos a mitad de la noche para orar con ella”.

El mayor de esos bebés ahora está en la universidad.

“Nina es mamá y abuela para todos ellos”, señaló la Sra. Guillén. “Y una madrina, también”.

Con la ayuda de Dios

El ministerio sigue creciendo. La Sra. Castro señaló que la ubicación de Jefferson City se está expandiendo para acomodar más servicios, incluida la tutoría después de la escuela.

Hizo hincapié en que la mayor parte del apoyo de El Puente proviene de contribuciones.

“Necesitamos muchos voluntarios y apoyo financiero”, afirmó. “Todo lo que hacemos, lo hacemos en base a donaciones”.

La Sra. Neal pidió oraciones “por las personas a las que ayudamos y las que todavía necesitan nuestra ayuda”.

La Sra. Castro pidió oraciones para que el personal de El Puente continúe con el legado de servir a los más necesitados con la pasión y el amor del Evangelio.

elpuentemo.org

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